El año 2006 recibimos la Reliquia que nos fue donada por los Hermanos del Convento de San Giovanni Rotondo, Italia y fue celebrada con una misa presidida por Monseñor Horacio Valenzuela donde se reunieron más de 2.000 personas.
Esta Reliquia es un pañuelo que contiene sangre derramada del costado del Santo Padre Pío. Esta sangre es un recuerdo de una vida entregada a Dios por los demás.
Actualmente la tienen en custodia, hasta que tengamos el Santuario definitivo, las Hermanas Carmelitas en Talca y todos los años se lleva para la conmemoración del Padre Pío, el 23 de Septiembre donde se hace una misa.